Orden Arqueodactyla

Los artiodáctilos son un orden de mamíferos ungulados cuyas extremidades terminan en un número par de dedos de los cuales apoyan en el suelo por lo menos dos; los dedos más desarrollados son el tercero y el cuarto y, salvo los hipopotámidos, son los únicos que se apoyan en el suelo. Habitan en todos los continentes, excepto en la Antártida, aunque los que se encuentran en Australia han sido introducidos por el hombre.

Los artiodáctilos actuales incluyen unas 220 especies repartidas en 10 familias1 entre las que destacan los camellos, llamas, cerdos, hipopótamos, vacas, antílopes, ciervos, jirafas, etc.

Las características principales de este orden son:  

·         Número par de pezuñas.

·         Extremidades largas, diseñadas para moverse rápidamente dentro del bosque. Este alargamiento se da en los huesos más alejados del cuerpo (manos y pies), donde al mismo tiempo se presenta una cierta tendencia a la fusión de estos huesos.

·         Las extremidades sólo pueden moverse en el eje anteroposterior del cuerpo.

·         Al caminar sólo apoyan las puntas de los dedos, cada uno de los cuales está protegido por una pezuña.

·         Se alimentan principalmente de hojas, flores y frutos. Este tipo de alimento es difícil de procesar debido a los altos porcentajes de celulosa presentes en las hojas, al mismo tiempo que son bastante pobre en proteína. Estas desventajas se ven contrarrestadas por la facilidad que supone conseguirlo. Para lograr digerir este material, han desarrollado adaptaciones como:  

1.      Dientes fuertes, especialmente los molares, para triturar el material vegetal.

2.      Musculatura bastante desarrollada en las mandíbulas.

3.      Un aparato digestivo especializado, donde el estómago está dividido en cámaras en las que se encuentran bacterias que pueden degradar la celulosa, y de esta manera permitir que el individuo saque algún provecho del material ingerido.  

Algunas familias de este orden han desarrollado otra estrategia para obtener un mayor provecho de su dieta. Esta estrategia es la de rumiar los alimentos. Es decir, devolver el alimento varias veces desde el estómago hacia la boca, donde lo vuelven a masticar para de esta manera ayudar a la digestión.  

Otro aspecto interesante de este orden, es que al igual que los Perissodactylos, frecuentan “salados” o sitios especiales donde consumen tierra. La razón de este comportamiento, aún no es muy clara; al parecer lo hacen para complementar su dieta pobre en algunos minerales. Otras teorías suponen que la razón de este comportamiento es regular el pH ácido de su tracto digestivo, o como medio de neutralizar ciertas toxinas presentes en las hojas que consumen.